Comuna Rhiannon

Rhiannon es una diosa galesa cuyo nombre significa reina divina de las hadas. La historia de la diosa celta nos recuerda el poder de curación del humor, lágrimas y el perdón. Ella es la diosa del movimiento y del cambio, todavía es firme y nos conforta en tiempo de crisis o pérdida. Rhiannon fue la diosa lunar de la fertilidad y renacimiento, transformación, sabiduría y magia. Ella fue adorada bajo la luz de la luna. Últimamente Rhiannon es honorada por conceder los deseos de quienes pudieron preguntar por lo que querían, y ella conoce el desprecio para quienes no pueden, o no podrán pedir lo que ellos quieran.




Es un hermoso lugar en las colinas a la misma altitud de Quito, 2800m. En un día despejado se pueden ver los volcanes Cotopaxi y el Cayambe. Es una zona muy silenciosa y tranquila, aunque hay un pueblo cerca donde hay Internet y pequeñas tiendas.





Llegamos la comuna con la intención de quedarnos 3 días. Fue pasando el tiempo y mientras esperábamos nuestros pasaportes fuimos conociendo todos los rincones y trabajos de este hogar (compost, recolectar verduras, alimentar a los chanchos, burros, gallinas y perros, arreglar cualquier cosa que lo necesitara…). Poco a poco nos fuimos enamorando del lugar y sus gentes hasta que nos dimos cuenta que llevábamos casi tres semanas allí.















Helen, la anfitriona, una inglesa que no lo parece, nos brindo todo su amor.

Nos despedimos entre lagrimas esperando poder volver a encontrarnos en el camino.




Otavalo


Esta pequeña ciudad de 26.000 habitantes, es famosa por la hospitalidad de la gente y el mercado de los sábados, que se remonta a los tiempos preincaicos, cuando se transportaban productos de la selva de las tierras bajas orientales para intercambiarlos por artículos de la zona montañosa. Hoy en día está enfocado a los turistas que se aglomeran los sábados por la mañana a gastar todo el dinero que pueden.


Llegamos a Otavalo y encontramos un hospedaje rápidamente. Descansamos y cuando fuimos a buscar el dinero….Fuck!!!! Nos han robado los pasaportes, la tarjeta de crédito y 180$!!!!!

Nos habían dicho que en Ecuador era experto en el robo al despiste y así fue. Pusimos la denuncia, cancelamos la tarjeta y nos repusimos tan rápido como pudimos.

Nos vino a la memoria una frase de un ecuatoriano que conocimos: “Si no te roban en Ecuador es como si no hubieses venido”, que cierto es, a partir de aquí encontraríamos a múltiples viajeros que habían sufrido robos también, uno incluso le robaron 4.000 dólares (no preguntes para que los llevaba encima, nosotros tampoco lo entendemos)

En fin, ¿Qué puedes esperar de un país que su capital se llama “QUITO”?.

Era viernes y hasta el lunes no podíamos ir al Consulado para pedir otros pasaportes, así que intentamos disfrutar de Otavalo.








Paseamos por sus mercados, compramos poco, evidentemente, y degustamos un chancho al horno que se deshacía en la boca como mantequilla. Mmmm!!!




El domingo salimos dirección a Malchinguí, donde se ubica la comuna Rhiannon….